Estás viendo

Una entrada

Especial: Pan de Bocata

ESPECIAL PAN DE BOCATAA menudo cuando oímos la palabra “bocata” nos sumergimos en nuestra infancia y se nos atisba una sonrisilla recordando nuestras meriendas a la salida del colegio. Era, sin duda, la mejor hora de todas. Estábamos deseando que acabaran las clases dispuestos a salir corriendo en dirección a los brazos de nuestros familiares que nos abrazaban con fuerza mientras nos decían “¿qué tal hoy en el cole?”. Nosotros deseosos contestábamos con un “muy bien, ¿me das ya la merienda, por favor?”.

Todas las meriendas eran mágicas. Mi madre casi siempre llevaba para merendar un bocadillo con el tradicional batido de chocolate que sorbíamos con la pajita blanca y roja. ¡Todos en la familia crecimos sanos y fuertes!

Recuerdo que antes de bajarme del coche para entrar al colegio les decía a mis padres que me dieran para merendar un “bocadillo pequeñito.” Día tras día me esperaban puntuales a la salida con un envoltorio de aluminio y al abrirlo me encantaba descubrir que un extremo del pan tenía piquito y el otro no. Devoraba primero el lado que estaba plano a consecuencia de la tajada del cuchillo, para terminar con la parte que más me gustaba, ¡el pico con esa crujiente corteza! Otros días no había pico, y los dos extremos del bocadillo eran planos. Aunque lo que más me gusta del pan eran los picos, lo disfrutaba igualmente. Al fin y al cabo, los amantes del pan disfrutamos de este rico alimento en cualquiera de sus formas y variedades.

Recuerdo la mañana que llegaron a casa unos panfletos publicitarios que llamaron mucho la atención de mis padres. Eran de color amarillo con muchos tipos de pan dibujados y un cartel muy grande que ponía “MUNDOPAN: PAN A DOMICILIO.”

Al día siguiente, mi sueño se hizo realidad. Desenvolví el paquetito de aluminio y ¡ahí estaba! ¡El bocadillo soñado! Era pequeñito, perfecto para la merienda y ¡con dos picos a cada lado! Esto sí que era verdadera magia. ¿Cómo se podía comprimir una barra de pan? ¿Habrían pegado con pegamento para cocinar los picos del bocadillo?

 Cuando llegamos a casa teníamos un buzón alargado justo al lado de la puerta de entrada, junto al garaje. En la cocina estaba el panfleto amarillo abierto en donde se leía “Variedades clásicas de pan: Bocata.” Una foto del mismo pan que minutos antes me había zampado ilustraba la página. ¡Habían resuelto la fórmula de las meriendas! ¡VIVA EL PAN BOCATA!

EL PAN BOCATA ES IDEAL PARA:

  • Este tipo de variedad clásica tiene el tamaño perfecto para que se pueda partir en dos y tostarlo. Con aceite y una pizca de sal (o azúcar) está para chuparse los dedos.
  • Media mañana. Para aquellos que estén trabajando y sobre mediodía sientan que tienen hambre, aprovechan para degustar un bocadillo de pan bocata de jamón serrano o queso con frutos secos. Les dará la energía que necesitan para aguantar todo el día.
  • El pan de bocata es el ideal para las excursiones o los viajes que coincidan con el horario del almuerzo. Este pan tostado con tortilla de patata, ensaladilla rusa o un buen lomo con queso derretido hará que se te pase tu trayecto ¡volando!
  • Desde los más pequeños hasta los mayores disfrutarán de un pequeño bocadillo relleno de lo que más les guste. Chocolate, jamón y queso, vegetal, embutidos, etc.
  • Demos la bienvenida al pan tumaca. La medida del pan de bocata no te resultará abundante para la cena. Con un poco de aceite, sal, un tomate restregado y jamoncito (o tofu, está delicioso), ya puedes irte a dormir soñando con dulces bocadillos pequeñitos con picos a ambos lados, como los que te zampabas a la salida del colegio. Tus favoritos de toda la vida.

Esperamos os haya gustado nuestra nueva entrada en el Blog.

Si vosotros también queréis disfrutar de la magia de recibir todos los días el pan que más os guste en la puerta de vuestro domicilio, contactad con vuestra delegación Mundopan más cercana y pedir información sin compromiso.

No hay pedido mínimo ni contrato de permanencia.