La importancia del pan en la dieta de nuestro día a día

Dice el refrán que las penas con pan son buenas, dando a entender que todo mejora con pan. Es verdad, sobre todo cuando nos referimos a nuestra alimentación. Y es que no todos conocen la importancia del pan en la dieta, pero tras leer este post esperamos que entiendas porque es tan bueno comer pan.

La verdadera importancia del pan en la dieta

El pan juega un papel destacado en la alimentación,  es bajo en grasas y proporciona muchos nutrientes como fibras dietéticas, vitaminas y minerales. Se trata de uno de los alimentos procesados más antiguos, su proceso de fabricación ha atravesado culturas y civilizaciones a lo largo de la Historia de la humanidad, con el paso del tiempo se han desarrollado muchas variedades que incluyen diferentes granos, los más comunes son trigo, espelta, centeno, avena y cebada, así como semillas como el sésamo o el girasol.

El pan es una valiosa fuente de proteínas, carbohidratos, fibra dietética, vitaminas del grupo B y minerales, un alimento que, a pesar de la sencillez de su elaboración aporta una base de nutrientes imprescindibles en cualquier dieta.

Todo el pan está hecho a partir de cereales (trigo, en la mayoría casos). Los granos de cereal constan de tres componentes principales:

• Salvado: la capa externa de la semilla que contiene gran parte de la fibra
• Germen: la pequeña parte de la semilla a partir de la cual crecería una nueva planta, contiene las vitaminas (incluyendo la vitamina E) y los minerales.
• Endospermo: el núcleo de la semilla, principalmente almidón y proteínas que proporcionarían los nutrientes a la nueva planta.

Las propiedades del grano de cereal se descubrieron hace ocho milenios en Mesopotamia, el sedentarismo sentó las bases de cultivos que dieron origen al pan, a partir de entonces la humanidad pudo aprovechar los beneficios de cada grano de cereal, una fuente incomparable de nutrientes para el cuerpo humano. Con el paso del tiempo este alimento ha seguido siendo una de las bases alimenticias de todas las culturas del mundo, quizá este hecho debería hacer que nos replanteásemos la importancia del pan en nuestra alimentación diaria.

En la actualidad la mayoría de la gente consume menos pan del que aconsejan los médicos. La regla general nos invita a comer 6 rebanadas de pan al día para tener una dieta balanceada, de 300 a 400 gramos dependiendo del ejercicio regular con el que acompañemos nuestra alimentación.

El valor nutricional del pan depende en gran medida de cómo se trata el grano durante el proceso de molienda para hacer la harina. Durante la molienda el salvado y el germen se pueden quitar, dejando el endospermo que se muele para hacer harina blanca. En cualquier caso el aporte nutricional de la harina resultante es igualmente beneficioso para nuestra dieta.

El pan hecho con harina integral (granos enteros) por lo general tiene más fibra, vitaminas y minerales que el pan blanco, sin embargo este último aún tiene un contenido significativo de nutrientes.

En definitiva, el pan es una valiosa fuente de proteínas, carbohidratos, fibra dietética, vitaminas del grupo B y minerales. En la actualidad conocemos todo lo que el pan aporta a nuestra dieta, pero mucho antes de que la ciencia demostrase sus propiedades ya pertenecía a aquellos alimentos que forman la base de la dieta de todas las civilizaciones debido a su valor nutritivo, su bajo precio, y la sencillez de uso de su ingrediente principal: los cereales.

¿Ya te has convencido de la importancia del pan en la dieta? Pues ahora no hace falta ni que salgas de casa a por el pan, porque ya te lo llevamos nosotros. Entra en Mundopán e infórmate